Serie Enfermedades Raras
IntraMed se ha propuesto hacer visibles a la comunidad médica un gran grupo de patologías que por su baja prevalencia suelen quedar en el olvido. De ello resulta que los pacientes que las padecen sufren demoras enormes en el diagnóstico y se ven perjudicados en su evolución. Hemos confeccionando una guía de recursos en estas enfermedades de manera de aportar al colega algunos datos sobre localización de expertos en el tema y centros de diagnóstico o derivación así como asociaciones de pacientes y familiares.
♦ Si Ud. maneja habitualmente alguna de estas patologías y quiere sumarse a nuestra iniciativa por favor tome contacto con nosotros, escríbanos a eventos@intramed.net
Descripción de la enfermedad: Deficiencia de Alfa1-Antitripsina
La Deficiencia de Alfa-1 Antitripsina es un trastorno hereditario que se transmite de padres a hijos a través de los genes. También se la conoce con el nombre de Enfisema Genético.
Del 1 a 3% de los pacientes que tienen Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) tienen Deficiencia de Alfa-1. En Argentina se calcula que unas dos millones de personas sufren de EPOC. Esto significa que podría haber de 20,000 a 60,000 personas con este trastorno. A pesar de su incidencia, los pacientes y los médicos han sido muy poco informados sobre esta enfermedad y la gran mayoría de las personas (95%) con Deficiencia de Alfa-1 no han sido diagnosticadas aún.
¿Qué es la Alfa1-Antitripsina?
La alfa1-antitripsina (Alfa-1 o AAT) es una proteína que circula en la sangre. Algunos científicos la llaman también “inhibidor de proteasa Alfa1”, por su localización en la banda de las alfa-globulinas en un proteinograma y por su función inhibidora de proteasa (principalmente la elastasa).
La mayor parte de la proteína Alfa-1 que circula en la sangre es producida por el hígado. La Alfa-1 protege los tejidos del cuerpo de ser dañados por la enzima elastasa presente en los neutrófilos, monocitos y eosinófilos. Estas células entran en acción cuando existe una inflamación en alguna parte del cuerpo. Por ser el tejido pulmonar uno de los más delicados del cuerpo, es el más afectado en las personas que tienen este trastorno.
La Alfa-1 normal se denomina M, por su migración media en un gel de electroforesis. Existen unas 100 variantes de Alfa-1 que causan deficiencia, todas producidas por mutaciones en el gen normal. Las que migran más rápido que la M se denominan con las primeras letras del alfabeto y las que migran más despacio con las últimas. Las variantes más frecuentes que producen enfermedad son la Z y la S.
¿Qué es la Deficiencia de Alfa-1?
La Deficiencia de Alfa-1 es un trastorno hereditario que puede causar EPOC (enfisema y bronquitis crónica) y con menor frecuencia una enfermedad crónica del hígado. Ambas enfermedades pueden poner en peligro la vida de las personas. El hígado de las personas con este trastorno no produce o produce una variante defectuosa de la proteína Alfa-1. Cuando la proteína es defectuosa, la misma no puede ser liberada a la sangre por los hepatocitos a la rapidez normal y se acumula en el hígado, ocasionando una deficiencia de Alfa-1 en la sangre y daño hepático en algunos pacientes. El bajo nivel de Alfa-1 en sangre deja desprotegidos a los pulmones de la acción de la elastasa, pudiendo ocasionar daño pulmonar.
La Deficiencia de Alfa-1 es una de las causas de enfisema en adultos jóvenes, de entre 30 y 40 años de edad. También es una de las causas más frecuentes de trasplante hepático en niños.
Se teoriza que la enfermedad hepática ocurre en algunos de los afectados porque la proteína Alfa-1 defectuosa que se acumula en el hígado no puede ser degradada (eliminada) por las células hepáticas por un defecto genético aún desconocido.
En muy raras ocasiones la deficiencia de Alfa-1 puede ocasionar una enfermedad de la capa de grasa de la piel conocida como Paniculitis y una inflamación de los vasos sanguíneos llamada Vasculitis de tipo C-ANCA-positivo.
¿Cuáles son los síntomas más comunes?
Relacionadas con los pulmones
· Falta de aire en descanso o al realizar algún esfuerzo (disnea)
· Silbido en el pecho (sibilancia)
· Tos crónica y/o producción crónica de flemas (esputo)
· Resfríos frecuentes
· Alergias durante todo el año
· Rápido deterioro de la función pulmonar sin una historia significativa de tabaquismo
Relacionados con el hígado
· Los ojos y la piel se ponen amarillos (ictericia)
· Acumulación de líquido en el abdomen y/o piernas (ascitis)
· Vómito de sangre o rastros de sangre en las heces
· Picazón generalizada (prurito)
¿Qué personas tienen riesgo de padecer la enfermedad?
La Deficiencia de Alfa-1 es una enfermedad genética que afecta a ambos sexos. Este trastorno ha sido identificado en todas las poblaciones, pero la mayor parte de los estudios realizados en diferentes grupos étnicos indican que existe una mayor incidencia entre caucásicos de descendencia europea. Se estima que la incidencia en la población general caucásica está entre 1/2500 y 1/3000.
Los fumadores que tienen Deficiencia de Alfa-1 son los que tienen mayor riesgo de desarrollar enfermedad pulmonar crónica (EPOC: enfisema, bronquitis crónica; bronquiectasias y asma).
Sólo el 5% de las personas con este trastorno desarrollan enfermedad hepática. Puede presentarse desde el nacimiento como un síndrome de hepatitis neonatal y colestasis. En Estados Unidos un 2,5% de los recién nacidos que tienen dos genes de AAT defectuosos (ZZ) mueren por falla hepática severa. Otros niños pueden presentar hepatogramas alterados o retrasos en el crecimiento. En general los problemas hepáticos se resuelven con la llegada de la adolescencia. Más adelante en la vida, después de los 50 años, la enfermedad hepática puede manifestarse como cirrosis y cáncer de hígado.
Transmisión genética y el riesgo asociado
Transmisión genética. Las personas que tienen genes AAT deficientes pueden pasarlos a sus hijos. En el caso de dos padres Pi MZ, tienen 50% de probabilidad de tener hijos portadores (Pi MZ), 25% de tener hijos normales (Pi MM) y 25% de tener hijos con Deficiencia de AAT (Pi ZZ).
El gen que codifica a la proteína AAT se encuentra en el cromosoma 14. Cada persona tiene 2 cromosomas 14 (uno del padre y otro de la madre). Los genes que codifican la AAT son co-dominantes, esto es, cada gen es responsable de producir el 50% de la AAT total que circula en la sangre El nivel de AAT considerado protector para no desarrollar enfermedad pulmonar es 11 µM (micromolar) lo que corresponde a 50 mg/dl por nefelometría y 80 mg/dl por inmunodifusión radial.
¿Qué personas deben hacerse el dosaje de Alfa-1?
La Organización Mundial de la Salud recomienda (1996) que se le realice la prueba que mide los niveles de Alfa-1 a todo paciente adolescente y adulto con asma o EPOC.
Posteriormente, en el 2003, la Sociedad Americana del Tórax y la Sociedad Europea de la Respiración (ATS/ERS, por sus siglas en inglés) en consenso publicaron un documento* con las nuevas guías de diagnóstico y tratamiento para la Deficiencia de Alfa-1.
Se recomienda la prueba a:
· Todas las personas con EPOC (enfisema y bronquitis crónica) o con asma que no revierte completamente luego del tratamiento con broncodilatadores
· Personas con bronquiectasias
· Recién nacidos, niños y adultos con enfermedad hepática crónica sin causa aparente
· Personas con antecedentes familiares de enfermedad hepática, EPOC y bronquiectasias
· Familiares o parejas de personas diagnosticadas con Deficiencia de AAT
· Personas con Paniculitis o Vasculitis de tipo C?ANCA positivo
Detección
En general, la Deficiencia de Alfa-1 se detecta con un simple análisis de sangre: dosaje de la proteína Alfa-1 para determinar su nivel en la sangre (método de inmunodifusión radial o por nefelometría). Cuando el nivel Alfa-1 está por debajo de los parámetros normales o si hay antecedentes familiares de Deficiencia de Alfa-1, se recomienda que se realice el estudio de fenotipo (prueba para determinar el tipo de proteína AAT presente en el suero) o el genotipo (detecta los genes S y Z en una muestra de sangre o epitelio bucal). Tanto el estudio de fenotipo como de genotipo son pruebas confirmatorias de la enfermedad.
Cuando existe enfermedad hepática crónica siempre se debe hacer el estudio de fenotipo.
Modificación de la conducta y estilo de vida
Las personas con Deficiencia de Alfa-1 no deben fumar NUNCA. Las evidencias demuestran que el tabaquismo aumenta significativamente el riesgo y la gravedad del enfisema en individuos con Deficiencia de Alfa-1 y que podría disminuir su expectativa de vida en más de diez años.
Se recomienda:
a) Dejar de fumar. Esta es la primera prioridad en el manejo del paciente con Deficiencia de Alfa-1
b) Evitar la exposición a contaminantes e infecciones.
Tratamiento
1. Vacunas (gripe/ neumonía y hepatitis A y B)
2. Tratamiento agresivo de las infecciones pulmonares (antibiótico terapia)
3. Broncodilatadores
4. Corticosteroides
5. Oxígeno suplementario
6. Terapia de reemplazo (sustitutiva). Este tratamiento específico aumenta los niveles en sangre de la proteína Alfa-1, retardando la progresión de la enfermedad pulmonar y disminuyendo las exacerbaciones. Sin embargo, la terapia de reemplazo no es una cura, no revierte el daño existente en el pulmón, ni trata o previene los problemas hepáticos relacionados con la Deficiencia de Alfa-1.
7. Programa de ejercicios supervisado
8. Apoyo psicológico/ familiar
9. Cirugía
· Reducción del volumen del pulmón
· Trasplante de órganos: pulmón o hígado
Asociaciones de Pacientes y Familiares:
FundEPOC, Comisión Alfa-1
FundEPOC (personería jurídica Nº 1.756.221 IGJ 174/2006) es un espacio creado por pacientes con EPOC al que más tarde se fueron adhiriendo pacientes con otras enfermedades respiratorias. Desde la Comisión Alfa-1 estamos comprometidos a difundir el conocimiento de la enfermedad en la comunidad médica y sociedad en general; brindar apoyo y orientación a pacientes y familiares e incentivar y apoyar la investigación científica que contribuya a encontrar una cura para esta enfermedad. Estamos vinculados con organizaciones de pacientes de América y Europa.
Dra. Sonia Iujvidin (Dra. en Ciencias Químicas)
(011) 4951-7343
Dra. Marta Gómez (Odontóloga)
(011) 4661-4660
E-mail: alfa1@fundepoc.org
Sitio web: www.fundepoc.org
Registro Nacional de Pacientes con Deficiencia de Alfa-1 Antitripsina
Dr. Guillermo Menga
E-mail: mengag@ciudad.com.ar
Sitio web: www.aamr.org.ar
Centros de Referencia y Especialistas:
Hospital de Rehabilitación Respiratoria María Ferrer
Finochietto 863- CABA
Conmutador: 4307-7474/1445
• Dr. Guillermo Menga
Jefe de Clínica Médica
Coordinador del Registro Argentino de Pacientes con Déficit de Alfa-1 Antitripsina, adherido al Registro Internacional Alfa-1 (AIR).
Hospital del Tórax Dr. Cetrángolo
Italia 1750
Vicente López- Provincia de Buenos Aires
Conmutador: 4791 2090
• Dr. Eduardo Giugno
Director del Hospital
Provincia de Santa Fe:
• Dr. Juan Carlos Figueroa Casas
Dirección: Paraguay 40, Rosario, Argentina
Tel. (341) 424 7773
email: jcfigueroa@arnet.com.ar
♦ Los invitamos a participar del Foro de Enfermedades Raras para compartir sus experiencias con colegas de Latinoamérica.
→ Si no logra visualizar la Guía en formato PDF, puede descargar el Adobe Reader haciendo click aquí
Gracias a todos cuantos colaboraron para que esta guía sea posible y a quienes harán uso de ella para que su propósito fundamental se haga realidad.
Una guía en permanente actualización
Invitamos a quienes tengan información acerca de otras enfermedades a ponerse en contacto con nosotros con el objeto de mantener una permanente actualización de la guía al mail: infomedica@intramed.net
♦ Para mas información sobre como obtener la Guía impresa comuníquese con nuestro centro de Atención al Cliente por Tel. al 0810-222-4687 o por mail a info@intramed.net