Uso y eficacia del Citalopram

Eficacia del Citalopram en la prevención de la depresión

Este estudio concluyó que el tratamiento prolongado con Citalopram es efectivo para prevenir la recurrencia de la depresión en pacientes mayores.

Autor/a: Dres. Klysner R, Bent-Hansen J, Hansen HL, Lunde M, Pleidrup E

Fuente: Br J Psychiatry 2002 Jul;181:29-35

Indice
1. Desarrollo
2. Resultados
3. Conclusiones

Es importante encontrar una terapéutica efectiva para la depresión en la persona mayor por la incidencia de esta enfermedad: según estudios epidemiológicos, entre el 10% y el 15% de las personas mayores manifiestan síntomas depresivos clínicamente significativos, entre el 1% y 2% padecen depresión mayor. A su vez, es frecuente que el curso de la depresión en el anciano muestre recurrencias o recaídas.

Los autores distinguen, en el tratamiento antidepresivo, tres fases:

I. tratamiento agudo, en el que se resuelven los síntomas de la depresión aguda;

II. tratamiento de continuación, que se prolonga durante 4-6 meses, para prevenir la recaída; y

III. tratamiento de mantenimiento, de profilaxis, en el que se previene la recurrencia.

En el estudio realizado por los autores de este trabajo, se investigó la eficacia del citalopran para prevenir la recurrencia en pacientes ancianos con depresión mayor, según el esquema de tres fases mencionado.

Método.

En el estudio participaron pacientes ambulatorios de la Psychiatric Research Clinic, Frederiksberg Hospital, respetando todas las normas éticas de la declaración de Helsinki y otros protocolos internacionales.

Población: Los pacientes se reclutaron a través de una carta expedida a todas las personas de 65 años de edad o más, habitantes de los municipios de Copenhague y Frederiksberg (Dinamarca) entre marzo de 1996 y diciembre de 1997, que apuntaba a identificar casos de depresión no descubiertos hasta el momento. Se consideraron elegibles para el estudio todos aquéllos a quienes se halló deprimidos y reunían los criterios de inclusión de la investigación.

Todos los incluidos tenían un episodio de depresión mayor unipolar (DSM-IV). Se excluyeron las personas en las que el episodio se había extendido por más de 12 meses, si en la historia se hallaba esquizofrenia, manía, hipomanía, epilepsia, uso indebido de drogas o alcohol, o si padecían trastornos somáticos graves. También se excluyeronlas personas que habían recibido fluoxetina dentro de las 5 semanas previas, u otros antidepresivos dentro de los 3 días previos al inicio del estudio; o litio, carbamacepina o valproato dentro de las 2 semanas previas al estudio, terapia electroconvulsiva dentro de las 8 semanas previas al estudio, o sumatriptano o anticoagulantes al comenzar el estudio. También fueron excluidos los que acusaron una puntuación igual o mayor a 5 en el ítem 10 de MADRAS (riesgo de suicidio).

Diseño del estudio.  Se dividió en tres períodos, correspondientes a las fases de tratamiento mencionadas. El Período I, de 8 semanas, fue de tratamiento abierto y agudo con citalopran;  el Período II fue de 16 semanas de tratamiento de continuación abierto con citalopran para consolidar la remisión; el Período III consistió en un tratamiento doble ciego con citalopran o placebo durante un mínimo potencial de 48 semanas.  Los pacientes continuaban con el tratamiento doble ciego hasta que completaban las 48 semanas o discontinuaban por cualquier razón.

Dosis administradas:  La dosis inicial de citalopran en el Período I fue de 10 mg/día durante los tres primeros días, aumentada luego a 20 mg/día. Después de una semana podía bajarse la dosis a 10 mg/día en caso de efectos adversos intolerables; si no, se continuaba con la dosis de 20 mg/día. Después de 3 semanas, los pacientes en 10 mg/día pasaban a 20 mg/día. En el resto de los pacientes se incrementaba la dosis en 10 mg después de 3-5 semanas hasta un máximo de 40 mg/día cuando no había mejoría.
En la semana 8, los pacientes ingresaban al Período II si lograban una puntuación suficiente en el MADRAS (£ 11). Si no, salían del estudio, o bien podían permanecer otras cuatro semanas si la remisión era parcial.

Si el puntaje en el MADRAS se mantenía en el límite inferior mencionado al completar el Período II, pasaban al Período III, incluidos de modo aleatorio en el grupo placebo o grupo citalopran, en el tratamiento doble ciego.

Los únicos fármacos concomitantes permitidos fueron las benzodiacepinas y otros hipnóticos, cuya dosis no podía ser modificada después de la octava semana del Período II. En los Períodos II y III no podía iniciarse la administración de benzodiacepinas excepto si su no intervención ponía al paciente en riesgo de recaída.

Medición de resultados. La principal medida de la eficacia profiláctica fue el tiempo transcurrido hasta la recurrencia de un episodio depresivo desde el comienzo del Período III. Se definió la recurrencia al alcanzar el paciente un puntaje ³ 22 en MADRAS, confirmado después de 3-7 días.

La evaluación de la seguridad y eficacia del citalopran durante el tratamiento profiláctico se basó en información acerca de efectos adversos, mediciones de signos vitales y evaluaciones de laboratorio. Los efectos adversos podían ser informados espontáneamente por los pacientes, observados por el investigador, o descubiertos por el investigador mediante preguntas abiertas.