La revisión sistemática y el metaanálisis cuantitativo brinda evidencia de que el Sildenafil es significativamente superior al placebo en todos los parámetros de evaluación en pacientes con DE. La diferencia de beneficio no fue sustancial según el enfermo recibiera 25 mg, 50 mg o 100 mg. Los enfermos con antecedentes de prostatectomía radical refirieron mejoría menos marcada.

El Sildenafil fue bien tolerado y, aunque los efectos adversos resultaron más frecuentes que en el grupo placebo, la mayoría fue de intensidad leve o moderada.
No hubo más interrupciones precoces por manifestaciones secundarias en sujetos que recibieron Sildenafil respecto de los asignados a placebo.

En conclusión, señalan los expertos, los resultados confirman la eficacia y seguridad del fármaco en el tratamiento de la DE. Sin embargo, estudios venideros de mayor dimensión deberán evaluar los beneficios a largo plazo y confirmar los hallazgos observados en algunos subgrupos de enfermos, es decir, de raza negra e hispánicos, con historia de prostatectomía, enfermedad vascular periférica, depresión y aquellos con mayor riesgo cardiovascular.

Artículo traducido por la Sociedad Iberoamericana de Información Científica. Reproducido con autorización.