Guía de manejo terapéutico

Asma en el embarazo

Un control deficiente puede tener como resultado varios efectos adversos tanto para la madre como para el niño

Autor/a: Jenny Huang, Jennifer Namazy

Fuente: JAMA. 2023;329(22):1981-1982 Asthma in Pregnancy

Introducción

El asma es una condición médica común que se estima que afecta entre el 8,4% y el  8,8% de las personas embarazadas. El asma no controlado durante el embarazo se ha asociado con resultados adversos como parto prematuro, bajo peso al nacer y preeclampsia. Las exacerbaciones del asma durante el embarazo pueden provocar la consulta en el departamento de urgencias, la hospitalización para el tratamiento de las reagudizaciones y, en raras ocasiones, la muerte.

En pacientes que conocían su asma durante el embarazo, datos recientes revelaron que el 60% de ellas no tuvo ningún cambio durante la gestación, pero el 40% tuvo un empeoramiento de sus síntomas; ningún individuo tuvo mejoría en su patología de base. Este hallazgo difiere de la observación anterior de que un tercio de los pacientes experimentan una mejoría, un tercio no presenta cambios y un tercio empeora los síntomas. Para algunas pacientes, el diagnóstico inicial de asma también se puede realizar durante el embarazo.

Diagnóstico

El diagnóstico de asma durante el embarazo puede complicarse por afecciones que imitan los síntomas del asma, en particular la disnea del embarazo, que puede distinguirse del asma por la falta de tos, sibilancias y obstrucción del flujo de aire asociadas. Otras condiciones en el diagnóstico diferencial incluyen obstrucción laríngea inducible, ansiedad con ataques de pánico asociados, goteo posnasal y reflujo.

La espirometría se puede utilizar durante el embarazo para confirmar el diagnóstico, al igual que en pacientes no embarazadas; la respuesta broncodilatadora significativa se define como un volumen espiratorio forzado en el primer segundo de la espiración (FEV1) que aumenta en un 12% y 200 ml o más después del tratamiento con un broncodilatador inhalado de acción corta.

Las pruebas de laboratorio no se utilizan de forma rutinaria para el diagnóstico o la vigilancia del asma, pero pueden usarse para ayudar a guiar el tratamiento cuando se consideran agentes biológicos en el asma grave.

Las radiografías de tórax, aunque se utilizan con frecuencia cuando se diagnostica asma, casi siempre muestran resultados normales. Debido al bajo rendimiento diagnóstico y la radiación asociada, no se recomiendan las radiografías de tórax durante el embarazo a menos que exista preocupación por una causa alternativa de síntomas respiratorios que puedan observarse en las imágenes.

Las provocaciones con metacolina, que pueden utilizarse en pacientes no embarazadas para confirmar el diagnóstico, están contraindicadas durante el embarazo. La fracción de óxido nítrico exhalado (FeNO), un marcador de inflamación eosinofílica de las vías respiratorias, se utiliza de forma rutinaria en pacientes no embarazadas para controlar el asma; los datos respaldan el tratamiento del asma guiado por FeNO en pacientes embarazadas.

La disnea durante el embarazo también puede estar relacionada con una embolia pulmonar. Se ha demostrado que el nivel de dímero D está elevado durante el embarazo, pero no se han validado para excluir el diagnóstico en la población embarazada. Cuando existe una preocupación significativa por una embolia pulmonar, se pueden considerar imágenes como las exploraciones de ventilación-perfusión.

Evaluación

En la evaluación del asma durante el embarazo, es importante analizar la gravedad en las pacientes que no reciben medicamentos de control y evaluar el control en las que sí los reciben. Las herramientas de diagnóstico comúnmente utilizadas para evaluar la gravedad y el control del asma incluyen la espirometría y el FeNO test.

Se recomienda utilizar la combinación de pruebas de función pulmonar y cuestionarios validados para evaluar el control del asma durante el embarazo en evaluaciones mensuales.

La Prueba de Control del Asma ha sido validada para su uso durante el embarazo y puede ser útil para monitorear el control en este grupo de pacientes. Los diarios de síntomas y los flujos espiratorios máximos pueden ser útiles para el autocontrol de los síntomas. También es importante realizar un seguimiento del uso de broncodilatadores de acción corta, ya que un uso más frecuente se correlaciona con un peor control.

Barreras al tratamiento

Existen varias barreras que pueden afectar el tratamiento del asma durante el embarazo. Este período es un estado agotador física y psicológicamente y las pacientes pueden dudar en comenzar o continuar con la medicación debido a la preocupación por su hijo. Los estudios han demostrado que las pacientes tienden a disminuir o suspender por completo el uso de medicamentos para el asma durante el embarazo a pesar de que los síntomas empeoran.

Para evitar la interrupción voluntaria de los medicamentos, se debe discutir la importancia del control del asma con las pacientes que están considerando quedar embarazadas. El miedo a dañar al feto con medicamentos es una barrera para el tratamiento de muchas pacientes. La educación sobre la importancia del cumplimiento de los medicamentos es una parte esencial del tratamiento. Desafortunadamente, los médicos también pueden representar una barrera al proporcionar inadvertidamente información contradictoria o incorrecta sobre el tratamiento y retrasar los aumentos necesarios de la medicación.

Algunos profesionales pueden dudar en usar corticoides para tratar las exacerbaciones durante el embarazo, pero una vez más, el asma mal controlada representa un riesgo mayor. Un debate y una educación más generalizados entre colegas pueden promover mejores prácticas y tratamientos para el asma en pacientes embarazadas.

Manejo no farmacológico

Los pilares del tratamiento no farmacológico del asma incluyen medidas para evitar alérgenos en pacientes sensibilizados, control del estrés y ejercicios respiratorios.

Las medidas para evitarlo incluyen retirar las mascotas o limitar la exposición a ellas, control de plagas, ventilación adecuada, medidas de control de ácaros del polvo y filtros de partículas de aire de alta eficiencia.

Las técnicas de manejo del estrés pueden incluir meditación, llevar un diario de gratitud y ejercicio supervisado por un médico. Se debe discutir con los pacientes el mantenimiento de una dieta saludable. Las visitas mensuales a sus médicos pueden ser beneficiosas para algunas pacientes durante el embarazo. Preservar la salud pulmonar durante el embarazo para reducir las exacerbaciones incluye evitar fumar, vapear y consumir cannabis. El monitoreo de la calidad del aire también se puede utilizar para reducir las exposiciones.

Manejo farmacológico

Hay datos limitados sobre la seguridad de los medicamentos durante el embarazo debido a la falta de ensayos clínicos, pero hay datos basados en el uso a largo plazo en la población y en estudios retrospectivos. El perfil de seguridad de muchos medicamentos de uso común durante el embarazo es generalmente tranquilizador. Sin embargo, se han informado resultados perinatales adversos en pacientes asmáticas embarazadas con asma grave o mal controlada.

El objetivo de la gestión es un buen control para evitar malos resultados. El tratamiento farmacológico del asma durante el embarazo es similar al tratamiento del asma en pacientes no embarazadas. El primer paso del tratamiento consiste en el tratamiento, con corticosteroides inhalados (CI) en dosis bajas (ICS), según sea necesario, o un agonista β2 de acción corta (SABA) con ICS.

El formoterol es un β2-agonista de acción rápida. El uso según sea necesario de ICS-formoterol es una nueva recomendación en las directrices de la Iniciativa Global para el Asma, y se necesitan más datos sobre su uso en pacientes embarazadas. Los corticosteroides inhalados también se pueden programar como medicamentos de mantenimiento con SABA según sea necesario si el asma no se controla con una combinación ICS-SABA.

El siguiente paso en el tratamiento consiste en ICS de mantenimiento en dosis bajas y β2-agonista de acción prolongada; la dosis se aumenta como paso posterior del tratamiento. Se pueden agregar antagonistas muscarínicos de acción prolongada si se necesita un mayor control, aunque faltan datos de seguridad para su uso durante el embarazo.

En términos de medicamentos biológicos, hay datos limitados sobre su uso durante el embarazo porque las personas que están embarazadas están excluidas de los ensayos clínicos, pero los datos retrospectivos sobre omalizumab muestran que los pacientes expuestos a esta droga durante el embarazo no tienen un mayor riesgo de sufrir defectos congénitos importantes. Se necesitan más investigaciones y datos para evaluar la seguridad de otros medicamentos biológicos durante el embarazo.

Se debe alentar a las pacientes a inscribirse en registros y bases de datos de embarazos porque esta participación proporciona información valiosa sobre la seguridad y eficacia de los medicamentos durante el embarazo.

Exacerbaciones del asma durante el embarazo

Aproximadamente el 5,8% de las personas son hospitalizadas por exacerbaciones del asma durante el embarazo. Hay varios factores de riesgo que colocan a las mujeres embarazadas en mayor riesgo de sufrir exacerbaciones. Las pacientes con una enfermedad más grave o difícil de controlar tienen más probabilidades de sufrir recurrencias. También se sabe que la falta de adherencia a la medicación, la obesidad, la raza afroamericana y las infecciones virales son factores de riesgo.

Existe cierta evidencia de que el reflujo concomitante puede aumentar el riesgo de exacerbación de los pacientes. No se ha demostrado que la atopia sea un factor de riesgo. El tratamiento de las exacerbaciones durante el embarazo incluye hospitalización en casos graves, administración de suplementos de oxígeno según sea necesario para mantener una saturación adecuada, uso de broncodilatadores de acción corta y uso de ICS y corticosteroides orales en combinación. En casos graves, también se puede utilizar magnesio intravenoso, magnesio inhalado o ambos.

Conclusiones

El asma es una de las afecciones médicas más comunes que afecta a muchas personas en edad fértil. El diagnóstico, evaluación y tratamiento del asma durante el embarazo es similar al de pacientes no embarazadas. Puede haber varias barreras para el control y tratamiento del asma durante el embarazo, pero el control del asma es imperativo porque un control deficiente puede tener varios resultados adversos tanto para la madre como para el niño. Los médicos y los pacientes deben trabajar juntos para lograr un control óptimo durante este período vital.