Un estudio de casos y controles de base poblacional

Los tatuajes como factor de riesgo de linfoma maligno

Mayor riesgo ajustado de linfoma general

Autor/a: Christel Nielsen, Mats Jerkeman, Anna Saxne Jöud

Fuente: eClinicalMedicine Volume 72, June 2024, 102649 Tattoos as a risk factor for malignant lymphoma: a population-based casecontrol study

Resumen

Antecedentes

La popularidad de los tatuajes ha aumentado drásticamente en las últimas décadas. La tinta para tatuajes a menudo contiene sustancias químicas cancerígenas, por ejemplo, aminas aromáticas primarias, hidrocarburos aromáticos policíclicos y metales.

El proceso de tatuar invoca una respuesta inmunológica que provoca la translocación de la tinta del tatuaje desde el lugar de la inyección. Se ha confirmado la deposición del pigmento del tatuaje en los ganglios linfáticos, pero los efectos a largo plazo sobre la salud siguen sin explorarse.

Utilizamos registros de la autoridad nacional sueca con cobertura poblacional completa para investigar la asociación entre la exposición a tatuajes y el linfoma maligno en general, así como los subtipos de linfoma.

Métodos

Realizamos un estudio de casos y controles en el que identificamos todos los casos incidentes de linfoma maligno diagnosticados entre 2007 y 2017 en personas de 20 a 60 años en el Registro Nacional de Cáncer de Suecia. Se tomaron muestras del Registro de Población Total de tres controles aleatorios emparejados por edad y sexo por caso mediante muestreo de densidad de incidencia.

Evaluamos la exposición mediante un cuestionario en 2021 y se recuperaron de los registros datos sobre posibles factores de confusión. Utilizamos regresión logística multivariable para estimar la tasa de incidencia (TIR) ​​de linfoma maligno en personas tatuadas.

Resultados

La población de estudio estuvo compuesta por 11.905 individuos y la tasa de respuesta fue del 54% entre los casos (n = 1398) y del 47% entre los controles (n = 4193).

La prevalencia de tatuajes fue del 21% entre los casos y del 18% entre los controles. Las personas tatuadas tuvieron un mayor riesgo ajustado de linfoma general (TIR = 1,21; IC del 95%: 0,99 a 1,48). El riesgo de linfoma fue mayor en personas con menos de dos años entre su primer tatuaje y el año índice (TIR = 1,81; IC 95%: 1,03–3,20).

El riesgo disminuyó con la duración de la exposición intermedia (de tres a diez años), pero aumentó nuevamente en personas que recibieron su primer tatuaje ≥11 años antes del año índice (TIR = 1,19; IC del 95 %: 0,94 a 1,50).

No encontramos evidencia de un riesgo creciente con un área más grande de superficie corporal total tatuada. El riesgo asociado con la exposición a tatuajes pareció ser mayor para el linfoma difuso de células B grandes (IRR 1,30; IC 95 % 0,99–1,71) y el linfoma folicular (IRR 1,29; IC 95 % 0,92–1,82).


Figura:
Razones de tasas de incidencia ajustadas (TIR) ​​de subtipos de linfoma maligno en participantes tatuados en comparación con participantes no tatuados. Las barras de error representan los límites superior e inferior de los intervalos de confianza 95 de las estimaciones. La exposición al tatuaje se modeló como a) estado de exposición (sí; no) y b) duración de la exposición (años). DLBCL, linfoma difuso de células B grandes.

Interpretación

Nuestros hallazgos sugirieron que la exposición a los tatuajes se asociaba con un mayor riesgo de linfoma maligno. Se necesita urgentemente más investigación epidemiológica para establecer la causalidad.


Valor añadido de este estudio

Hasta donde sabemos, este es el primer estudio epidemiológico que investiga la asociación entre la exposición a tatuajes y el linfoma maligno general, así como los subtipos de linfoma, utilizando un diseño de casos y controles basado en la población y un tamaño de muestra grande. El estudio incluyó todos los casos incidentes de linfoma maligno que fueron diagnosticados en personas de 20 a 60 años entre 2007 y 2017 en Suecia, con tres controles del mismo sexo por caso. Descubrimos que las personas tatuadas tenían un riesgo 21% mayor de linfoma maligno general en comparación con las personas no tatuadas, y que la asociación era más fuerte para el linfoma difuso de células B grandes y el linfoma folicular.

Implicaciones de toda la evidencia disponible

El estudio sugiere que los tatuajes pueden ser un factor de riesgo de linfoma maligno que es procesable desde una perspectiva de salud pública. Se necesitan más investigaciones epidemiológicas para establecer la causalidad. El estudio subraya la importancia de las medidas regulatorias para controlar la composición química de la tinta del tatuaje.