En la Facultad de Ingeniería

La UBA homenajea a Ian, quien pese a su cuadro, pudo recibirse

Cuando comenzó a cursar, le habían dado un año de vida por un glioblastoma. Falleció siete años después, tras terminar la tesis. Desde IntraMed, homenajeamos su historia.

Fuente: IntraMed

Este viernes 17 de mayo, a las 17, la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires (FIUBA) homenajeará a Ian Epstein, el joven que se recibió de ingeniero contra todo tipo de pronósticos médicos, ya que a principio de la carrera le descubrieron un glioblastoma (un tumor cerebral que tiene un promedio de sobrevida de un año), pero falleció luego de finalizar tu tesis, siete años después de conocer su diagnóstico.

La institución de estudios pondrá una placa recordatoria en una de sus aulas, motivo por el cual sus familiares desean agradecer el enorme gesto de la casa de estudios. “Esta es una semana de muchas emociones, pero queremos agradecer a la UBA que es enorme, a la FIUBA por este gesto gigante que nos ayuda a conectarnos con Ian desde el logro, el desafío cumplido, el esfuerzo, la decisión, la dignidad y no con el dolor”, indicó la doctora Melina Huerin, médica cardíologa y mamá de Ian a IntraMed.

Convertirse en ingeniero le requirió a IAN convencimiento y audacia, aún antes del diagnóstico. Es que según había relatado Huerin en una nota previa con este medio, Ian fue el único de la familia en animarse a seguir una carrera que no estuviera relacionada con la medicina. Tanto ella como su marido, Eduardo Epstein, son cardiólogos, mientras que sus otros dos hijos eligieron también el camino de la salud: Lucas se especializó en terapia intensiva mientras Teo optó por la medicina interna.

“En mi casa no te preguntan qué carrera vas a seguir… te preguntan qué especialidad”, solía bromear Ian. Hoy, sus familiares lo recuerdan tenaz y metódico, “a lo ingeniero”, tanto en seguir su cronograma de estudios como el de turnos, consultas, radioterapias y cirugías.

Ian se recibió el 6 de junio de 2022 y falleció dos meses después. Su familia recibió el título en nombre de él el 26 de septiembre del mismo año. Durante un discurso en esa ceremonia, su mamá dijo: “Hiciste toda la carrera sólo pensando en la carrera. Tu desafío NO era curarte, era ser ingeniero”. También recordó que “del tumor no se hablaba”, que Ian nunca dejó de cursar varias materias en simultáneo y que no se ponía nervioso por su salud, sino por las fechas muy cercanas entre finales.

Este viernes, en la sede de Paseo Colón 850, se espera otro momento emotivo. “Así como Ian fue un guerrero silencioso, la UBA siempre estuvo acompañándonos. Y todo lo que han hecho  y hacen, lo hacen en la intimidad, de corazón, sin ninguna intención más que celebrar y valorar a Ian y su desafío. ¡Gracias a la UBA!”, cerró Huerin, agradecida.